Fundado el 17 de enero de 1783, su nombre proviene de una especie de garza llamada "garzón" que habitaba la región en tiempos coloniales. Conocido como la "Capital Diocesana del Huila" y el "Alma del Huila", Garzón destaca por su riqueza cultural y religiosa, albergando numerosos templos, seminarios y monasterios.
Su economía se basa principalmente en la agricultura, destacándose el cultivo de café, plátano, cacao y arroz. Además, la ganadería y la piscicultura complementan su actividad económica.